LA LIBERTAD

La libertad no está al término de ningún camino, sino que es un camino sin límites, sin fin ni comienzo; no es ninguna frontera, sino una línea imaginaria que retrocede conforme avanzamos, como el horizonte en el mar. Es una meta ilusoria; pero el incentivo de llegar a ella no está en sí misma, sino en el placer de la marcha, tanto más intenso, cuanto más rápida y accidentada sea. Nadie puede darnos la libertad si nosotros no la queremos, si no combatimos por ella día y noche y si no defendamos a brazo partido la senda recorrida.

Luis ARANQUISTAN.